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| Disfraz de geisha |
Para empezar, lo primero que hay que hacer es ponerse una base de maquillaje de color blanco. Yo, lo que hice, fue aplicarme una crema hidratante, y después pintarme toda la cara con una cera blanca dura (que puedes encontrar en cualquier tienda de disfraces). Me la extendí uniformemente con los dedos, y quedó genial.
El siguiente paso son los ojos y las cejas. Para estas últimas, necesitas un lápiz de color negro o un eyeliner. Debes pintar las cejas por encima de las tuyas, y para obtener los ojos más rasgados como una geisha es recomendable dibujarlas ascendentes (como en la foto). Los ojos tienes que delinearlos también con el mismo lápiz negro, tanto por arriba como por abajo. Dejando los lagrimales y los rabillos con una prolongación de la línea negra un poco más exagerada, para simular los ojos de una geisha. Y, justo en el rabillo, dibujamos 3 puntitos rojos. Es muy fácil, con un pequeño pincel humedecido en un poco de agua, mojas el pintalabios rojo, que más tarde usarás para los labios.
Y, para finalizar, nos pintaremos los coloretes, con una sombra de coloretes rosa. Así como también, pondremos un poco de esta sombra en los párpados móviles. Y, como guinda a nuestro pastel, nos perfilaremos los labios en forma de corazón con un perfilador rosa o rojo, y terminaremos pintándolos con el pintalabios que habíamos usado antes para hacer los puntitos rojos.
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